Si la altura de un torneo se mide por la altura del estadio que lo alberga, debemos convenir que ninguna competición puede superar a la Supercopa 2022, cuyo recinto cuenta con el techo más alto del fútbol mundial.

La imponente cubierta del Estadio Internacional King Fahd de Riyadh, que parece sacada de los sueños artísticos de un experto en origami, se eleva hacia el cielo de la capital saudí, proporcionando sombra a los 30.000 espectadores que podrán seguir cómodamente esta esperada #SuperSupercopa desde sus asientos, una vez que se establezcan las normas de reducción de aforo debido al Covid-19.

Este miércoles 12, a partir de las 20:00 (hora española peninsular, 22:00 en Riyadh), el FC Barcelona y el Real Madrid darán inicio al torneo en un majestuoso recinto con capacidad para más de 60.000 espectadores, que es el escenario habitual de los actos de celebración del Reino de Arabia Saudí, incluyendo su aniversario de fundación que se celebró allí mismo en septiembre de 2017.

Los tres partidos del torneo, incluyendo la final del 16 de enero, se disputarán en un recinto cuyo nombre rinde homenaje al monarca saudí Fahd bin Abdulaziz, quien reinó en el país desde 1982 hasta su fallecimiento en 2005.

Fue durante la década de los 80 cuando el arquitecto malayo Michael KC Cheah, famoso por los estadios deportivos que ha diseñado en Asia, planeó esta espectacular construcción que fue inaugurada en 1987 y que dos años después vio a Portugal ganar la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA, gracias a una brillante generación de jugadores encabezada por Joao Pinto, Rui Costa, Abel Xavier y Luis Figo.

Sin embargo, fue el delantero saudí Majed Abdullah, conocido como el Pelé del desierto, quien marcó el primer gol en este estadio, que es popularmente conocido como La Perla y que en este comienzo de 2022 verá brillar a los mejores futbolistas de la liga española durante un torneo histórico.