El déficit del Estado hasta julio se encuentra en el 2,68% debido al impacto que las liquidaciones definitivas de 2021, realizadas en 2023, han tenido en comparación con las liquidaciones definitivas de 2020, realizadas en 2022. Concretamente, las liquidaciones definitivas del sistema de financiación de 2021 ascienden a 11.798 millones a favor de las comunidades autónomas y entidades locales, frente a los 6.106 millones a favor del Estado del año pasado. Por lo tanto, si se restan del déficit de ambos periodos los resultados de estas liquidaciones definitivas, teniendo en cuenta el efecto generado por el registro del IRPF en contabilidad nacional y las partidas de gasto relacionadas con las coberturas de saldos negativos, el déficit del Estado en el séptimo mes del año sería un 5,9% inferior al del mismo periodo de 2022.
Además, el Ministerio de Hacienda y Función Pública también ha publicado hoy en su página web los datos del déficit consolidado de la Administración Central, Comunidades Autónomas y Seguridad Social correspondientes al mes de junio, en términos de contabilidad nacional, que también se ha reducido un 5,1% frente al mismo periodo del año anterior.
En cuanto al déficit del Estado en julio, hasta el momento se sitúa en un 2,68% del PIB, lo que equivale a 37.682 millones. Los recursos no financieros del Estado alcanzan los 142.890 millones, lo que representa un 3,6% menos en comparación con el mismo periodo de 2022. Los impuestos representan el 81,4% de los recursos totales, ascendiendo a 116.288 millones, con un aumento del 0,9% respecto a julio de 2022. Los impuestos sobre la producción y las importaciones aumentaron un 1,4%. Entre las novedades impositivas de 2023, destaca la introducción del nuevo Impuesto Especial sobre los Envases de Plástico No Reutilizables, el Gravamen temporal energético y el Gravamen temporal de entidades de crédito y establecimientos financieros de crédito, con un importe total de 1.633 millones.
Por otro lado, los empleos no financieros del Estado se han situado en 180.572 millones hasta julio, un 4,8% más que en los siete primeros meses de 2022. Las transferencias entre administraciones públicas representan la partida de mayor volumen, con un 64,2% del total de empleos no financieros. En concreto, ascienden a 115.842 millones, un 8% más que el año anterior, debido principalmente a la dotación adicional de 1.666 millones destinada a Comunidades Autónomas y Corporaciones Locales para compensar el saldo negativo de la liquidación de 2020.
En cuanto al déficit conjunto de la Administración Central, Comunidades Autónomas y Seguridad Social en junio de 2023, se sitúa en 30.186 millones, lo que equivale al 2,14% del PIB, una reducción del 5,1% respecto al primer semestre de 2022. Incluyendo el saldo de la ayuda a las instituciones financieras, el déficit se sitúa en el 2,17% del PIB.
El déficit de la Administración Central alcanza los 21.203 millones a finales de junio de 2023, equivalente al 1,51% del PIB. El déficit del Estado en junio, en términos de PIB, representa el 1,72%, alcanzando la cifra de 24.200 millones, un 6,2% menos que en el sexto mes de 2022. Los organismos de la Administración Central registran un superávit de 2.612 millones en junio de 2023, un 132,2% más que en el mismo periodo del año anterior.
Por su parte, la Administración regional presenta un déficit a finales de junio de 2023 de 12.110 millones, lo que equivale al 0,86% del PIB, frente al déficit del 0,65% alcanzado en el mismo periodo del año anterior. Este resultado se debe a un aumento del gasto del 8,4%, mientras que los ingresos crecen a un ritmo del 5,5%. Los impuestos han aumentado un 8,1%, alcanzando los 39.425 millones, y las transferencias entre administraciones públicas ascienden a 54.017 millones.