La Comisión de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad ha aprobado de manera definitiva la modificación del Plan General que afecta al área ‘Parque Metro Cuatro Caminos’, donde se ubicaban las antiguas cocheras del metro. Ahora, esta tramitación deberá pasar por un último paso en la sesión ordinaria del Pleno municipal de este mes para recibir su aprobación final. De esta manera, el proyecto impulsado por el área dirigida por Borja Carabante responde a la situación de 443 familias que llevan años esperando tener sus viviendas.
El proyecto ‘Parque Metro Cuatro Caminos’ permitirá recuperar para la ciudad un espacio urbano cercano a Cuatro Caminos, con un gran potencial urbanístico. El entorno se transformará al eliminar las cocheras del metro en la superficie y, con ello, su fuerte impacto negativo en el medio ambiente, a través de su futura construcción subterránea. Además, esta actuación supondrá la urbanización de amplias zonas verdes públicas.
El área ‘Cocheras Metro Cuatro Caminos’ abarca una superficie de 43.250 m2. Dentro de esta área, se distinguen dos zonas. La primera, con una superficie de 38.564 m2, se encuentra en el espacio donde antes estaban las instalaciones y cocheras del metro y donde se llevará a cabo la nueva edificación. La segunda zona corresponde a dos áreas residenciales consolidadas, que ahora serán cerradas, y al tramo de la calle de Esquilache, con una superficie total de 4.690 m2.
Los nuevos usos residenciales y comerciales se ordenarán alrededor de una gran zona verde central. El subsuelo ubicado debajo de ella será utilizado para el transporte ferroviario, el mantenimiento de las cocheras del metro. Las nuevas zonas verdes y espacios libres públicos ocuparán más de 9.400 m2.
La superficie edificable asciende a 59.586 m2. Del total de la edificación residencial, el 10% se destinará a viviendas de protección oficial, lo que significa que de las seis parcelas dedicadas a uso residencial, cinco serán de viviendas de mercado libre y una será de vivienda protegida. Además, el área contará con dos parcelas destinadas a oficinas y una para uso público administrativo. Como resultado de este plan, el Ayuntamiento de Madrid recibirá 5.485 m2 de edificación residencial y 472 m2 de edificación para oficinas.
El área contará con un mínimo de 1.050 plazas de aparcamiento, de las cuales 949 serán para uso residencial y de oficinas. El futuro edificio del Ayuntamiento de Madrid tendrá otras 101 plazas.
En cuanto a la mejora del entorno y la protección del patrimonio, se implementarán tres acciones para conectar el área con la trama urbana: se completará la calle de Esquilache para conectarla con la calle de Ramiro II y la avenida de la Reina Victoria; se abrirá una vía pública de conexión entre la calle de Bravo Murillo, Esquilache y la avenida de Pablo Iglesias; y se prolongará la calle de Virgen de Nieva para conectar Bravo Murillo con Esquilache.
El área se encuentra dentro del entorno del Bien de Interés Cultural (BIC) declarado como Conjunto Histórico «Recinto de la Villa de Madrid». Para la redacción de este proyecto, se ha tenido en cuenta la protección de dos edificios en la calle Esquilache (números 7 y 12), así como el plan especial que afecta a la parcela del colegio El Porvenir (calle de Bravo Murillo, 85) con el objetivo de mejorar la calidad ambiental del conjunto urbano y en particular, la visualización de la capilla del colegio desde los espacios públicos.
Según los dictámenes de las comisiones encargadas de la protección del patrimonio, se ha propuesto la catalogación de tres elementos: la entrada del antiguo túnel del metro que servía como acceso a las vías de las líneas 1 y 2, el cerramiento de la Casa Tuduri y el muro lateral de las cocheras.