En el primer trimestre de 2024, Iberdrola ha alcanzado un beneficio neto de 2.760 millones de euros, con inversiones récord de 2.382 millones de euros, lo que representa un crecimiento del 36% con respecto al mismo período del año anterior. La compañía ha reafirmado su compromiso con la electrificación de la economía, según lo establecido en su Plan Estratégico presentado en marzo.
El beneficio neto se ha visto impulsado por nuevas inversiones, el aumento de la producción renovable en la Península Ibérica y la venta de activos en México. Además, se han reportado dos aspectos no recurrentes correspondientes a 2024 y 2023.
El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, ha destacado la solidez del modelo de negocio de la compañía y el impacto positivo de las inversiones realizadas. También ha anunciado la mejora de las previsiones para el ejercicio 2024, con un crecimiento del beneficio neto en un dígito alto.
La empresa ha destinado el 51% de su inversión total al negocio de redes, con un incremento del 27% en relación al año anterior. Las inversiones en renovables representan el 42% del total, con un enfoque especial en la eólica marina. Iberdrola genera energía 100% libre de emisiones en varios países.
Además, se ha registrado un incremento del flujo de caja operativo y una mejora en la liquidez de la compañía. Se espera que durante el año entren en servicio nuevos proyectos de energía eólica marina.
Iberdrola también ha anunciado el pago de un dividendo complementario en julio, que se sumará al ya distribuido en enero. Se presentará este plan a los accionistas en la Junta General que se llevará a cabo el 17 de mayo en Bilbao.