Ginebra – La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) emitió un comunicado recordando a los gobiernos la importancia de proteger la aviación civil, incluyendo la infraestructura aeroportuaria y de navegación aérea, durante los tiempos de conflicto.
La aviación civil y su papel crucial
“La aviación civil cumple un propósito que trasciende la política para ‘crear y preservar la amistad y el entendimiento entre las naciones y los pueblos del mundo’. La Convención de Chicago, firmada hace ochenta años mientras la Segunda Guerra Mundial estaba en marcha, comienza con esas palabras. Son un recordatorio atemporal del papel esencial y único de la aviación civil en conectar a las personas y entregar bienes a través de vastas distancias. En el turbulento mundo de 2024, la verdad del preámbulo de la Convención de Chicago resuena con fuerza.
La necesidad de proteger vuelos y estructuras críticas
Todos deseamos vivir en un mundo en paz. Lamentablemente, hoy, esa realidad está lejos de ser alcanzada para muchas personas. Por eso, es necesario recordar a todos los involucrados en el conflicto la necesidad de garantizar que los vuelos sean seguros y que las infraestructuras aeroportuarias y de navegación aérea no sean blanco de hostilidades.
El compromiso con los estándares internacionales
La aviación civil no toma partido en conflictos políticos. Como industria que requiere la implementación efectiva de estándares globales para operar, la aviación sostiene los estándares globales y el orden internacional basado en normas de los cuales dependen. Como lo indica su nombre, la aviación civil sirve a la población civil. Debe mantenerse libre de peligros por parte de todos los actores en un conflicto. Esta es la firme creencia de la IATA. Más importante aún, es la obligación indiscutible de los gobiernos bajo el derecho internacional. Por ejemplo:
- El artículo 13 de la Declaración Universal de Derechos Humanos protege la libertad de movimiento tanto a nivel nacional como internacional.
- El artículo 48 de la Cuarta Convención de Ginebra establece que los combatientes en conflicto no deben atacar objetos civiles.
- Las normas básicas del derecho internacional consuetudinario requieren que todas las partes en un conflicto permitan y faciliten el paso rápido y sin impedimentos de la ayuda humanitaria para civiles en necesidad y aseguren la libertad de movimiento del personal autorizado de ayuda humanitaria.
Las consecuencias de no proteger la aviación civil
Estas obligaciones legales internacionales serán inalcanzables si se difumina la línea entre la aviación militar y civil, incluso mínimamente. Eso traería consecuencias profundamente preocupantes para las poblaciones inocentes que intentan sobrevivir en medio del conflicto, y especialmente para aquellos que necesitan ayuda humanitaria.
La obligación de proteger aeronaves civiles
Además, la Convención de Chicago obliga explícitamente a los Estados a proteger las aeronaves civiles y a los pasajeros en vuelo, abstenerse del uso de la fuerza contra aeronaves civiles y, por ende, coordinar y comunicar cualquier actividad que pueda ser peligrosa para la aviación civil. Estos aspectos son esenciales para mantener la seguridad en los vuelos.
El deber de los combatientes
Mientras el mundo trabaja hacia días más pacíficos, la aviación apoyará el esfuerzo al conectar a personas y bienes. En este ínterin, los combatientes deben conocer y cumplir con las normas de conflicto y asistencia humanitaria establecidas en el derecho internacional. Para simplificar: no causar daño a aeronaves civiles, aeropuertos o servicios de navegación aérea. Esto es innegociable y debe ser respetado, incluso en el apogeo de la hostilidad.”
Willie Walsh, Director General, IATA