El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria continúa con las obras de la plaza Santiago Tejera en San Cristóbal
El proyecto permitirá dotar al barrio marinero de un área de juegos infantiles y nuevas zonas verdes con especies vegetales resistentes a las condiciones ambientales propias de las zonas costeras. Los trabajos tuvieron que ser modificados por la presencia de los restos de una fábrica que se encontraba en el lugar de actuación.
Detalles de la inversión y el diseño
El Ayuntamiento, a través de la Concejalía de Planificación, Desarrollo Urbano y Vivienda y la Concejalía de Ciudad Mar, continuó los trabajos para construir, en la plaza Santiago Tejera, un área de juegos infantiles y nuevas zonas verdes. Esta actuación, que contó con una inversión de 1.152.834,08 euros, cofinanciada con fondos FEDER a través de la Estrategia DUSI, generaría una plaza pública con nuevos equipamientos y dotaciones básicas de carácter social y cultural.
El proyecto, que tuvo que ser modificado debido a la presencia de los restos de una fábrica que se encontraba en el lugar, incluye cuatro espacios principales en la plaza: una zona de estancia asociada al paseo y a la línea de mar, que también funcionaría como barrera contra el oleaje; una zona de juegos infantiles integrada y sin vallado delimitador; otra zona de plaza de barrio; y un espacio amplio y descubierto en el que se podrían realizar varias actividades.
Otras actuaciones en San Cristóbal
Recientemente, el Ayuntamiento concluyó los trabajos de mejora en el paseo de San Cristóbal, con una inversión de 717.159,49 euros, que habían permitido restaurar los daños provocados por el paso del tiempo y los temporales. Esta actuación supuso la reposición de las piezas de piedra del paseo marítimo, además de la renovación de las arquetas municipales y mejoras en los accesos a la playa.
Por otro lado, estaba prevista la rehabilitación del edificio ‘Cachalote’, con una inversión de 3,2 millones de euros procedentes de los fondos NextGenerationEU. Esta actuación permitiría convertir este espacio en una instalación referente de la arquitectura de la ciudad, puesto que contaría con una piel de vidrio fotovoltaico adosada a la estructura actual, que funcionaría también como captadora de energía renovable. De esta forma, el Consistorio continuaría con una línea marcada de regeneración urbana y transición ecológica.