En una comparecencia en Moncloa, Sánchez explicó que el real decreto ley contenía 29 medidas, las cuales incluían la revalorización de las pensiones conforme al IPC, la mejora de las pensiones mínimas, las ayudas a los municipios, hogares y empresas afectados por la DANA, las ayudas al transporte público y las ayudas a los afectados por el volcán de La Palma. Además, avanzó que incluía también una medida adicional en materia de vivienda, que no figuraba en el anterior, que era la «creación de un sistema público de avales y garantías para propietarios e inquilinos».
En lo que respecta al paquete económico, el presidente afirmó que el Gobierno «estaba negociando con los grupos parlamentarios para que pudiera ser aprobado en cuestión de semanas». Se refirió a medidas como el apoyo a la industria electrointensiva, el Plan Moves para la compra de vehículos eléctricos, o las entregas a cuenta para mejorar la financiación de las comunidades autónomas. A su juicio, se hablaba de «medidas necesarias y buenas para el país», que «les piden las administraciones públicas y el tejido productivo», por lo que esperaba que contaran «con el apoyo de una mayoría de grupos parlamentarios». «Al menos de aquellos que comparten la voluntad de que nuestro país siga liderando el crecimiento económico y la generación de empleo en Europa», dijo.
Mejora del bono social de la electricidad
Pedro Sánchez recordó que se había dicho que este real decreto ley contenía medidas que harían subir el precio de la luz. «Es falso, no es verdad. De hecho, es justo al revés. Este decreto mejora el bono social del que se benefician las familias vulnerables a la hora de pagar su factura de la luz», subrayó.
Sánchez aclaró que «se había dicho que se regalaba un palacete al PNV, pero aquí no se regala nada. Se devuelve a su legítimo dueño un inmueble que fue incautado por la Gestapo alemana y el franquismo en los años 30». También explicó que «respecto a que este real decreto ley subía el IVA de los alimentos, se trataba de otra falsedad, otro bulo, otra mentira«, ya que «no contenía ninguna medida al respecto. Ninguna».
El Gobierno de los acuerdos
En opinión del presidente, los últimos días enseñaron que, «a pesar de las dificultades, y a pesar de estar en minoría parlamentaria, el Gobierno de coalición progresista era el Gobierno de los acuerdos. Unos acuerdos que, destacó, «les habían permitido cosechar cifras récord de crecimiento económico, de transformación de su modelo productivo, de creación de empleo y, al mismo tiempo, de reducción de las desigualdades y de los gases de efecto invernadero». Esto se había conseguido «con paz social«, a diferencia de lo ocurrido en otros momentos de su país, en los que se aprobaron de manera unilateral contrarreformas que encontraron rechazo social, como ocurrió con la contrarreforma laboral o la contrarreforma de las pensiones.
Además, el jefe del Ejecutivo agradeció a todos los miembros del Consejo de Ministros «su aptitud y actitud, porque no daban un partido por perdido, sudaban la camiseta, y al final las cosas salían, en favor de la mayoría social», como prueba la revalorización de las pensiones. También mostró su agradecimiento y reconocimiento a los grupos parlamentarios que, desde posiciones alejadas, eran capaces de pensar en el interés general y llegar a acuerdos en beneficio de la gente. «El ruido de la democracia a veces puede resultar incómodo, pero siempre será infinitamente mejor que el silencio de las autocracias. En este país, por desgracia, lo saben bien», agregó.
Durante su comparecencia, Sánchez destacó los datos de la EPA, que reflejaban que España registró la tasa de paro más baja de los últimos 16 años y creó casi medio millón de empleos. Quiso poner en valor que las previsiones para el año siguiente eran también de un intenso ritmo en la creación de empleo y que representaban el 40% del crecimiento económico del conjunto de la Unión Europea. Este progreso tan notable no era un mérito en exclusivo del Gobierno, dijo, sino «de todos los grupos parlamentarios que lo hacían posible con sus votos, de las empresas y trabajadores, y del conjunto de la sociedad española». «A todos ellos, quiero darles las gracias«, concluyó.