Hoy ha comenzado la operación de cinco autobuses de hidrógeno por parte de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de Palma, tras haber permanecido sin uso durante casi dos años debido a la falta de suministro de combustible. Este lanzamiento coincide con el partido entre el RCD Mallorca y el RC Celta, durante el cual el equipo bermellón utilizó uno de estos autobuses decorado especialmente con el escudo del club y el lema “Tots al partit en transport públic” para trasladarse desde su hotel hasta el Estadi Son Moix.
El alcalde de Palma, Jaime Martínez Llabrés, aprovechó la ocasión para agradecer al CEO de Negocios del RCD Mallorca, Alfonso Díaz, por la colaboración del club en esta iniciativa que promueve una movilidad más sostenible.
Detalles sobre la puesta en marcha de los autobuses
Durante el evento, se proyectó un video informativo en el videomarcador del estadio que presentaba esta nueva iniciativa. Además de operar en el traslado de los jugadores, estos autobuses comenzarán a reforzar las líneas L8 y L33, que son las encargadas de llevar a los aficionados al estadio durante los partidos en casa del RCD Mallorca.
La reactivación de los autobuses de hidrógeno se produce dos años después de su adquisición por parte del anterior gobierno, coincidiendo con el inicio de producción de hidrógeno verde en la planta de Lloseta. Para que los autobuses pudieran comenzar a operar, fue necesario completar un proceso administrativo que incluyó la licitación y contratación del suministro de hidrógeno, llevado a cabo por el equipo actual de la EMT.
Plan de electrificación y nuevas instalaciones
En los últimos días, se ha realizado el llenado de hidrógeno en los autobuses utilizando un dispensador diseñado específicamente para este propósito, un proceso que toma alrededor de 15 minutos por vehículo. Además, los autobuses fueron sometidos a la ITV y realizaron un rodaje inicial sin pasajeros. El hidrógeno es transportado en camiones desde la planta de Lloseta a la estación logística de Palma, con la capacidad para almacenar aproximadamente 400 kilos, lo que asegura el suministro diario necesario para el funcionamiento.
La EMT de Palma también está avanzando hacia la electrificación de su flota. A principios de marzo, se ratificó un acuerdo para la compra de 113 autobuses eléctricos, con una inversión total de 98 millones de euros a lo largo de cuatro años. Este proyecto tiene como objetivo lograr que más del 50% de la flota sea eléctrica para 2027, y alcanzar una flota 100% ecológica para 2030.
Paralelamente, se está desarrollando el proyecto del nuevo centro ECO/EMT en el polígono de Son Rossinyol, que tiene como fin convertir a la EMT en un referente en sostenibilidad y transporte electrificado. Este nuevo centro, que ocupará un solar municipal de 29.325 m², contará con instalaciones modernas, pantógrafos para carga de autobuses y sistemas de energía solar. Las obras están previstas para iniciarse en 2025.