La regidora de Infraestructuras, Belén Soto, realizó una visita al parc de la Quarentena, un emblemático espacio ajardinado en Palma que ha sido recuperado después de años de descuido. Este jardín conecta el Passeig Marítim con el barrio de El Terreno y ha sido objeto de diversas mejoras por parte del Ajuntament.
Durante su recorrido, Soto estuvo acompañada por representantes de las asociaciones vecinales de El Terreno-Bellver y Passeig Marítim, y por el coordinador general de Infraestructuras y Accesibilidad, Juanjo Lemm. La concejal aprovechó la ocasión para explicar a los asistentes las actuaciones realizadas en este parque, que responden a una «reivindicación histórica» del vecindario. «Hemos querido escucharles y destacar el valor de este parque», enfatizó Soto.
Mejoras y restauración del parc de la Quarentena
Este parque fue inaugurado en 1970 y es conocido por su diseño en forma de ‘zig-zag’, el cual conecta diferentes niveles de la ciudad y ofrece miradores con vistas a la bahía. Su nombre proviene de los edificios que en el pasado funcionaban como lugares de cuarentena durante una epidemia que afectó al Mediterráneo en el siglo XVII.
A finales de 2024, el Ajuntament de Palma emprendió diversas obras para mejorar los jardines, las cuales ya han sido completadas. En concreto, el servicio de Enllumenat Públic instaló 21 farolas de cuatro metros de altura, con un diseño neoclásico, correspondiente a un presupuesto de 123.682 euros. Además, se reforzó la iluminación del área de juegos infantiles, donde se introdujeron nuevos equipos recreativos, y se iluminó con luces LED un mural del artista Luis Castaldo.
Asimismo, se incorporaron elementos específicos para resaltar ciertos árboles y una fuente ornamental en la entrada superior. También está planificada la instalación de alumbrado adicional como parte del plan Palma Brilla, que iluminará el muro de cerramiento de la entrada y sus escudos.
Instalaciones recreativas y mobiliario
En términos de recreación, el servicio de Parcs i Jardins, con un presupuesto de 110.978 euros, incorporó diversas áreas de juegos, incluyendo un castillo, un columpio, y un módulo de ‘Track Ride’. En total, se instalaron 25 bancos de madera accesibles y 12 papeleras, así como cartelería en el área destinada a los niños y una fuente de agua potable, mejorando así la experiencia de los visitantes.
Belén Soto destacó que la rehabilitación del parc de la Quarentena es una muestra del compromiso del Ajuntament por dignificar los espacios públicos y devolverlos a la ciudadanía, convirtiéndolos nuevamente en lugares de encuentro, juego y recreo para todos.
