El asesinato del locutor de radio Ralikonelo Joki ha dejado conmocionados a los periodistas de todo el mundo. El presidente del National Press Club, Eileen O’Reilly, y el presidente del National Press Club Journalism Institute, Gil Klein, han emitido una declaración pidiendo una investigación completa y justicia para Joki, quien fue asesinado a tiros el 14 de mayo en Lesoto.
Según informes, Joki, quien utilizaba el nombre Leqhashasha en el aire, fue atacado después de su transmisión del domingo por la noche mientras dejaba el Ts’enolo FM en Maseru. Recibió un total de 14 disparos, uno de los cuales le impactó en la cabeza. El programa de radio de Joki cubría temas como el gobierno, la agricultura y la corrupción, y se sabe que había recibido tres amenazas de muerte a través de Facebook en los últimos meses.
El Comité para Proteger a los Periodistas ha denunciado los tiroteos relacionados con la actividad periodística en Lesoto, y ha destacado que en julio se juzgará otro caso de un editor de Lesotho Times que fue tiroteado en 2016. Estos hechos son muy preocupantes y deben ser condenados por toda la sociedad.
El National Press Club, fundado en 1908, es la principal organización profesional de periodistas del mundo, con 3000 miembros que representan a casi todas las principales organizaciones de noticias. Por su parte, el Instituto de Periodismo del Club Nacional de Prensa se dedica a promover la ciudadanía global a través de una prensa independiente y libre, y a equipar a los periodistas con las habilidades y los estándares para informar de manera objetiva al público.
En definitiva, el asesinato de Ralikonelo Joki es una triste muestra de la peligrosidad que enfrentan muchos periodistas en todo el mundo. La libertad de prensa es un derecho fundamental que debe ser protegido en todas las circunstancias, y es responsabilidad de todos luchar por ella. Desde el National Press Club, continuaremos trabajando para defender la integridad y la seguridad de los periodistas, y para fomentar un periodismo ético y responsable.
