En la reunión del Comité Científico de la Ruta Europea del Jardín Histórico (ERHG), que tuvo lugar a finales de abril, se decidió informar favorablemente sobre la candidatura del Jardín Histórico de El Bosque de Béjar a la Junta Directiva y la Asamblea General de la entidad, que se reunió en Florencia y aprobó hoy la inclusión de este jardín en la Ruta Europea del Jardín Histórico. Desde hoy, España cuenta con 15 jardines dentro de la Ruta.
El Bosque de Béjar, situado en Castilla y León, es una villa suburbana de origen renacentista creada en 1567 por el Duque de Béjar. Es uno de los pocos ejemplos de jardín histórico que se conservan en la región. Fue declarado Jardín Artístico en 1946 y Bien de Interés Cultural (BIC) en 1982, con la categoría de Jardín Histórico del Patrimonio Histórico Español. Su propiedad es compartida por el Ayuntamiento de Béjar y la Junta de Castilla y León.
La Ruta Europea del Jardín Histórico es una asociación sin ánimo de lucro que agrupa a jardines históricos europeos e instituciones con el objetivo común de proteger y promover el patrimonio de los jardines históricos. Fue certificada como Itinerario Cultural del Consejo de Europa en octubre de 2020. Esta asociación promueve y sensibiliza sobre los jardines históricos, generando una oferta cultural y turística de calidad que contribuya al desarrollo sostenible de los territorios donde se ubican.
La incorporación de El Bosque de Béjar en la Ruta Europea del Jardín Histórico significa un reconocimiento internacional a los trabajos de conservación, recuperación y difusión que se han estado llevando a cabo en este importante jardín desde hace varios años, bajo los criterios de intervención más respetuosos con el patrimonio cultural. Con la intención de avanzar en su gestión, protección y mejora permanente de sus instalaciones, se presentará un nuevo proyecto colaborativo denominado ‘Jarcultur plus’ en la nueva convocatoria de proyectos INTERREG. El objetivo de este proyecto será mantener su uso cultural y su accesibilidad al público, así como favorecer la conservación del jardín y asegurar su sostenibilidad a largo plazo, con la participación de los propietarios para la obtención de beneficios sociales, culturales y económicos.
