La Junta de Gobierno ha acordado continuar con el convenio que mantiene con la Red FACIAM, que financia diversos programas de las entidades sociales que la integran, dirigidos a la atención de personas sin hogar en la ciudad. La vicealcaldesa y portavoz municipal, Inma Sanz, ha informado que el Ayuntamiento de Madrid concederá una subvención directa por importe de 2,4 millones de euros para ofrecer a personas en situación de calle servicios de alojamiento, manutención y asistencia social a través de los centros de FACIAM.
Colaboración histórica
Con esta colaboración, que se ha mantenido durante 25 años, el Consistorio madrileño garantiza el funcionamiento en la capital de una estructura de atención a personas en contexto de sinhogarismo, que complementa a la Red Municipal de Atención a Personas Sin Hogar. En concreto, esta aportación económica, realizada por el Área de Políticas Sociales, Familia e Igualdad, cofinancia la actividad del Albergue San Juan de Dios, la Fundación San Martín de Porres, la Orden Hospitalaria San Juan de Dios-Santa María de la Paz, Apostólicas del Corazón de Jesús, Cáritas Diocesana de Madrid y Sercade (Capuchinos).
Apoyo a personas en situación de calle
Dichos centros desarrollan una labor de apoyo a personas en situación de calle. En ellos, no solo se cubren las necesidades básicas de los usuarios, sino que se inician itinerarios de recuperación personal y de inserción social y laboral. Estos recursos disponen de 466 plazas de alojamiento y 235 plazas adicionales en modalidad de centros de día. Durante 2023, la Red FACIAM atendió a 3.583 personas.
Atención a jóvenes en exclusión residencial
Asimismo, el Ayuntamiento de Madrid ha financiado desde el año 2021 un programa de la Red FACIAM, encaminado a lograr la inclusión social de 150 jóvenes de entre 18 y 28 años en exclusión residencial. Con este programa, se pretende detectar a estas personas de forma temprana y ofrecerles una respuesta especializada para atender sus necesidades.
La red dispone de 63 plazas de alojamiento en pensiones o pisos, que sirven como punto de partida para brindar, en paralelo, un acompañamiento tanto individual como grupal. Esto permite que los jóvenes puedan acceder a derechos como la sanidad, la vivienda, el trabajo o la educación, y les ayuda a alcanzar una posterior autonomía e independencia económica.
El importe de los proyectos que llevan a cabo las entidades sociales asciende a 5 millones de euros, de los cuales el Ayuntamiento de Madrid aporta 2,4 millones, lo que representa el 48% del total.