El titular de Transportes ha detallado el estado de la movilidad en la provincia de Valencia, la más afectada, para arrojar luz sobre la posibilidad de moverse en los días siguientes, «aunque todavía faltan elementos de juicio suficientes para hacer un análisis definitivo de los daños».
Estado de las carreteras
En primer lugar, el ministro ha informado sobre la situación de la Red de Carreteras del Estado, donde 80 km de vía han resultado dañados, comenzando por la autovía A-7, que ha sufrido los mayores daños a lo largo de unos 15 km, tanto en el bypass de Valencia como, especialmente, a la altura de Quart de Poblet y hasta la localidad de Silla.
El viaducto colapsado en Quart de Poblet, en la circunvalación de Valencia, está provocando graves dificultades, dado que por allí circulan unos 100.000 vehículos al día, convirtiéndose en el punto más crítico. Este incidente ha provocado el corte total de los movimientos en la A-7, desde y hacia el sur, entre el enlace de la A-3 y la localidad de Silla.
Información sobre vías afectadas por la DANA.
«Su reposición va a llevar meses, pero ya estamos trabajando en soluciones provisionales y en la implantación de alternativas que faciliten la circulación, con restricciones de velocidad». En este sentido, Puente ha mencionado que se tardaría algunas semanas en determinar los daños en su totalidad y, para ello, la Dirección General de Carreteras ya estaba trabajando en una solución, mediante cajones en paralelo, para permitir que el tráfico pasara por ese punto a 40 km/h.
Mientras tanto, se está ofreciendo como itinerario alternativo la V-30, que tiene la calzada en sentido puerto de Valencia con algunas restricciones y la calzada en sentido contrario gratuita de restricciones; y la V-31, donde se ha logrado abrir una de las dos calzadas para la circulación doble de vehículos, ya que la calzada en dirección sur se encontraba bloqueada por vehículos siniestrados. Ambas vías también han sufrido daños, por lo que habrá muchas dificultades y restricciones en estos itinerarios alternativos.
La autovía A-3 en el acceso a la ciudad de Valencia está abierta con restricciones. Las áreas más afectadas se encuentran en Requena, Utiel y Chiva, con graves daños en la calzada.
Además, las carreteras convencionales que unen Requena, Utiel y Teruel también han sufrido incidencias graves, dejando una situación muy complicada en la infraestructura, con colapsos en estructuras y cesiones de terreno. Así, la N-330 tiene daños en los drenajes en los km 230 y 236 y un puente colapsado en el km 194; mientras que la N-322 también ha sufrido el colapso de una estructura en el km 454.
Por último, toda la red de carreteras autonómicas está seriamente dañada, y el ministro ha mencionado la CV-36, que tiene sus cinco viaductos colapsados.
Situación del ferrocarril
La situación de la alta velocidad ferroviaria también presenta puntos críticos que impiden la circulación entre Madrid y Valencia, con graves daños en la vía y en la plataforma. En particular, el ministro se ha referido a dos puntos gravemente afectados:
- Túnel de Chiva, donde 1,2 km de infraestructura han cedido completamente. 300 m a cada lado del túnel y 631 m dentro del túnel. «Habrá que reponer totalmente 1,2 km de infraestructura de alta velocidad».
- Túnel de Torrent, donde casi 3 km se han inundado completamente. Se esperaba que se pudiera limpiar en el día para luego diagnosticar los daños.
Así, Puente ha señalado que el servicio no sería posible hasta 2 o 3 semanas después, indicando esta horquilla temporal como la duración mínima aproximada de los trabajos de reposición que se debían realizar, siempre que no se encontraran daños más severos.
El ministro ha subrayado que «ya se está trabajando, a pesar de la dificultad de acceder a ese punto mediante vagonetas e incluso con exploración a pie del personal de Adif».
Cercanías
El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, durante su comparecencia para informar sobre el estado de las infraestructuras viarias y ferroviarias tras el paso de la DANA.
«En Cercanías, la situación es gravísima», afirmó, al tiempo que detalló que, de las 5 líneas de Valencia, la C-1 (Valencia Nord-Gandía), C-2 (Valencia Nord-Moixent) y C-3 (Valencia Nord-Utiel) estaban muy dañadas en muchos puntos, con la desaparición de plataforma, vías y la infraestructura en sí, por lo que no se podría contar con ellas a corto plazo.
La C-3 tiene 90 km dañados, de los cuales 45 km estaban en situación de zona 0. La C-2 y C-3, en un tramo que comparten en la zona de Silla, estaban totalmente destrozadas. Además, 25 km de la C-2 se encontraban en las mismas circunstancias.
Así, en torno a 80 km de red estaban totalmente destruidos, «ni utilizables ni reparables, por lo que había que reponerlos completamente y por eso la circulación iba a tardar mucho tiempo en reponerse. En el caso de la C-1 y C-2, la afectación era menor, pero en la C-3 sería de muchos meses».
Por su parte, las líneas C-5 (Valencia Nord-Caudiel) y C-6 (Valencia Nord-Castelló) estaban en condiciones de ponerse en circulación, a pesar de los daños. Sin embargo, «no se haría hasta estar seguros de que las condiciones climatológicas lo aconsejan».
La C-6 comparte la vía con Euromed, hacia Barcelona, pero tampoco estaba funcionando aún debido a la alerta naranja en Castellón y las restricciones de movilidad que las autoridades aconsejaban. Sobre esta línea había caído un camión, en la zona de Burriana, un incidente que ya se había solventado.
Valoración global de la situación
En definitiva, «va a costar reparar y reponer, no solo económicamente, que también, sino en esfuerzo y tiempo», por lo que el ministro ha hecho un llamado a la población para evitar que, de forma individual, intente rescatar o sacar los vehículos, dado que estas acciones pueden dificultar la labor de los trabajadores públicos. Se recomendó estar al tanto de las recomendaciones de las instituciones públicas implicadas en general, y de la DGT en particular para temas relacionados con la circulación.
En una rueda de prensa celebrada en la sede del Ministerio, el responsable del Departamento envió un mensaje de solidaridad y condolencias hacia las víctimas de uno de los mayores desastres vividos en el país en los últimos años. Además, agradeció y animó a los trabajadores públicos que estaban trabajando intensamente en la zona, mencionando que «solo del Departamento de Carreteras tenemos 300 personas desplazadas en el terreno, dejándose todo para intentar volver a la normalidad».
