El centro tecnológico Eurecat ha pronosticado que el año 2024 será el momento en que la Inteligencia Artificial Generativa comenzará a tener un impacto significativo en una amplia gama de sectores, incluyendo la salud, la construcción, la manufactura, la educación, las finanzas, el comercio y la administración.
El director científico de Eurecat, Daniel Casellas, destaca el potencial de transferir los nuevos desarrollos tecnológicos en el campo de la Inteligencia Artificial Generativa a diferentes sectores, generando nuevas oportunidades, siendo sostenibles y fortaleciendo la resiliencia industrial.
Por su parte, la directora científica del Área Digital, María Eugenia Fuenmayor, señala que la Inteligencia Artificial Generativa seguirá siendo una tendencia en 2024, evolucionando hacia modelos más avanzados, multimodales, eficientes y precisos, con mejoras en la ética y transparencia de los resultados.
Sin embargo, Fuenmayor indica que los modelos de lenguaje necesitan mejorar en varios aspectos para poder ser adoptados de manera efectiva por las empresas, como el consumo de recursos, la adaptación a necesidades específicas, la poca explicabilidad de los resultados y la posibilidad de incluir sesgo e información incorrecta en las respuestas.
El director científico del Área Industrial de Eurecat, Ricard Jiménez, prevé que la Inteligencia Artificial Generativa se abrirá paso en el mundo de la manufactura y se posicionará en las cadenas de suministro de diversos sectores para optimizar eficiencia, calidad, costes y procesos.
Además, Francesc Puiggròs, director científico del Área de Biotecnología, señala que la IA Generativa también tendrá un papel protagonista en el sector de la salud, utilizándola para interpretar datos biológicos y acelerar la innovación en el ámbito de la salud.
En cuanto a la sostenibilidad, Joan de Pablo, director científico del Área de Sostenibilidad de Eurecat, destaca que la circularidad de los metales en los ciclos urbanos e industriales será una tendencia clave durante 2024, especialmente en un contexto donde se enfrentan retos significativos como el cambio climático, la descarbonización y la disponibilidad de recursos críticos.