El Gobierno sigue avanzando en el despliegue de los fondos europeos del Plan de Recuperación con la aprobación de proyectos que supondrían 1.000 millones de euros de financiación para seguir impulsando la transformación de la economía española.
Proyectos aprobados por el Consejo de Inversión
Con cargo a los préstamos previstos en la segunda fase del Plan de Recuperación, el Consejo de Inversión del Fondo de Resiliencia Autonómica (FRA) ha aprobado los seis primeros proyectos de inversión, que supondrían financiación del Fondo por importe de más de 1.000 millones de euros, y generarían una inversión total de 3.545 millones de euros.
Impacto de los proyectos en la economía
Estos proyectos son los primeros que se financian a través del Fondo de Resiliencia Autónoma, gestionado por el Grupo BEI, a través del que se podrán canalizar hasta 20.000 millones de euros de los fondos ‘Next Generation’ para financiar proyectos públicos y privados regionales en condiciones ventajosas.
Los proyectos aprobados tendrían un gran impacto social, climático y económico, y se estima que generarían más de 21.600 puestos de trabajo. Se desarrollarían en 13 comunidades autónomas y permitirían ampliar y mejorar las infraestructuras educativas y los servicios de salud pública, así como modernizar y ampliar la red de distribución eléctrica y el sistema de gestión de aguas.
Desarrollo de los proyectos
Los proyectos serían desarrollados por Iberdrola, la Generalitat de Catalunya, la Junta de Castilla y León y la Comunidad de Madrid.
Participación del Consejo de Inversión
El Consejo de Inversión, adscrito al Ministerio de Economía, Comercio y Empresa, contaría con la participación de las comunidades y ciudades autónomas y con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). Asimismo, en la última reunión se puso en marcha el instrumento de financiación alternativa para el desarrollo sostenible («Alternative Lending for Sustainable Development»).
Gestión del nuevo instrumento de financiación
Este instrumento sería gestionado por el Fondo Europeo de Inversiones (FEI) y permitiría financiar, a través de fondos de deuda alternativa, a pymes y pequeñas midcaps. Contaría con una contribución de España de hasta 200 millones de euros. Se esperaría que estos proyectos tuvieran un importe medio de 3-15 millones de euros. Los fondos concederían préstamos o participaciones de cuasi-capital («quasi-equity») a los proyectos y tendrían un requisito mínimo de coinversión.