Al término de la reunión, el general jefe de la Unidad Militar de Emergencias (GEJUME), Javier Marcos, compareció en el Ministerio de Defensa para informar del avance de los trabajos realizados por las Fuerzas Armadas en toda la zona de acción, que abarca 4.608 kilómetros cuadrados, aproximadamente un 43% de la superficie de la provincia de Valencia. El máximo responsable del dispositivo del Ejército para enfrentar esta situación quiso trasladar «a todos los valencianos» que «las Fuerzas Armadas estaremos con ustedes todo el tiempo que haga falta, y seguiremos dándolo todo, todo el tiempo que haga falta. Les pido que estén tranquilos porque estaremos con todos sin descanso hasta el final». En ese sentido, señaló que «nuestro mayor reto es hacer que la gente pueda hacer ‘lo de siempre’ lo antes posible».
Avances significativos y compromiso de las fuerzas armadas
El general Marcos afirmó que, diez días después de la riada, «se ha avanzado mucho y se ha trabajado mucho», aunque también «queda mucho por hacer». Explicó que esos 4.608 kilómetros cuadrados afectados están divididos en cuatro sectores y que, en todos ellos, hay soldados y marineros trabajando, pertenecientes a la UME, la Guardia Real, el Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Aire, hasta un total de 8.474 efectivos. Esta fuerza ha incrementado sus capacidades con una jefatura de Ingenieros del Ejército de Tierra y más buques de la Armada «para fortalecer la búsqueda y localización de posibles desaparecidos o fallecidos en el litoral»; además, se ha multiplicado por seis el número de equipos de buceo. También añadió que «el Ejército del Aire está preparado con aviones en las bases para comenzar relevos, de manera que mantengamos siempre el mismo número de militares en la zona».
En cuanto a los medios empleados, estos superan ya los 2.000, incluyendo vehículos de intervención especializados, helicópteros, drones y máquinas de ingenieros, que están realizando un despliegue «único». A esto se suman las capacidades que aportan diversas empresas y organismos públicos y privados, cuya colaboración está siendo canalizada por la UME para garantizar un rendimiento ordenado y controlado.
Durante su intervención, el GEJUME también concretó que hay un total de 72 municipios afectados y que el Ejército está presente en todos ellos, así como en las vías de comunicación que los unen. Llevan realizadas casi 600 misiones, de las cuales algunas han durado horas y otras están en curso desde el primer día. Además, han llevado a cabo 353 trabajos en aparcamientos.
Excelente coordinación con la Comunidad Valenciana y los ministerios
El general Marcos se refirió a la “excelente coordinación” de las Fuerzas Armadas con la Comunidad Autónoma Valenciana y con todos los ministerios a través del comité de crisis que se reunió a diario, gestionando una información precisa y actualizada sobre lo que estaba ocurriendo. También mencionó la “magnífica relación” con la Dirección Técnica de la Emergencia; una integración que se produce no solo a nivel directivo, sino también a nivel ejecutivo en el terreno, y que, al igual que con el resto de comunidades, es una relación de confianza, sólida y construida a lo largo de años.
En cuanto a los municipios, defendió su actuación señalando que muchos de ellos no pudieron actuar debido a que estaban arrasados y tenían los sistemas informáticos caídos o su maquinaria de emergencia encerrada en hangares, sin poder acceder a ella inicialmente. «Estamos trabajando codo con codo con ellos y estamos reforzando su estructura”, añadió.
Las Fuerzas Armadas estuvieron preparadas desde el primer momento
También explicó que los puntos más críticos son Paiporta, Chiva, Masanasa y Catarroja, aunque «la fotografía no es fija». Concretamente, Paiporta es la localidad donde mayor número de actuaciones están desarrollando las Fuerzas Armadas, con un total de 88 actividades, que incluyen achique de agua y lodos, rescate, evacuaciones de personal y reparto de alimentos.
Preguntado sobre la supuesta tardanza en la actuación de las Fuerzas Armadas, Marcos aseguró que no permitiría que «ningún soldado ni yo perdamos un minuto en hacer valoraciones que no son del ámbito de nuestra responsabilidad» y reiteró que «las Fuerzas Armadas estuvieron preparadas desde el primer momento como respaldo y capacidad complementaria y subsidiaria» a la Comunidad Autónoma. «La UME estaba allí desde el principio» y «intervinimos lo antes posible», subrayó.
Mis declaraciones «no van contra nadie ni a favor de nadie. Son reflejo de la legalidad», afirmó. En este sentido, el GEJUME recordó que con el nivel 2, la dirección corresponde a la comunidad que sufre la emergencia y la UME complementa y suple todas las capacidades logísticas, de comunicaciones, etc.