Madrid está preparada para enfrentar las inclemencias del clima debido a las bajas temperaturas y la posibilidad de nevadas en la capital. Esto es gracias al significativo aumento de los recursos para el Plan de Nevadas 2024, derivado de los contratos firmados por el Gobierno municipal en 2021. Estos contratos supusieron un incremento del 45% en los recursos y de 2.000 trabajadores más. La vicealcaldesa y portavoz, Inma Sanz, explicó que la inversión para estos contratos superó en 200 millones de euros al año a la cantidad destinada en ejercicios anteriores. Este aumento ha permitido triplicar varios de los recursos del plan de nevadas, como la cantidad de salmuera, los esparcidores y las cuchillas quitanieves.
Esta inversión histórica en limpieza se concretó en 2021 en los contratos del servicio de limpieza y de ‘contenerización’, recogida y transporte de residuos, lo que implicó también un incremento del 158% del presupuesto destinado al Servicio de Limpieza Urgente (SELUR).
El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha anunciado que el Plan de Nevadas para el año 2024 incorporará un 211% más de salmuera, un 197% más de esparcidores y 120 nuevas cuchillas quitanieves a los camiones de recogida de residuos. Además, se ha reforzado la información de los mapas térmicos con sensores fijos y móviles.
El Plan de Nevadas 2024 incrementa también un 14,8% el personal, un 53,8% los medios manuales y un 16,7% los equipos mecánicos. El Ayuntamiento establece la época de riesgo por inclemencias meteorológicas entre el 21 de noviembre y el 31 de marzo, activando su Plan de Viabilidad Invernal a instancias de la Dirección General de Emergencias.
El plan se activa en distintas fases, desde una fase inicial preventiva hasta una fase de alerta por posibilidad de precipitaciones en forma de nieve. Además, el Ayuntamiento dispone de una red de primera intervención y un visor en el Geoportal para que los ciudadanos puedan consultar el estado de limpieza de las calles durante los trabajos de limpieza.
Finalmente, el Plan de Emergencias Invernales establece distintos niveles de alerta (amarillo, naranja y rojo) en función de los avisos de la Agencia Estatal de Meteorología.