La niacinamida, también conocida como la vitamina B3, es un ingrediente cosmético cada vez más popular en productos para el cuidado de la piel, debido a sus propiedades calmantes, iluminadoras, antioxidantes y para eliminar manchas solares. Sin embargo, su efecto puede variar dependiendo de la concentración en la fórmula.
Concentraciones de niacinamida superiores al 10% pueden tener un efecto contrario al calmante, provocando irritación y granitos en la piel. A pesar de esto, la niacinamida en porcentajes más bajos sigue siendo beneficiosa para la piel, especialmente si se combina con otros ingredientes calmantes o se utilizan en pieles más acostumbradas a activos antiedad.
Se recomiendan productos con niacinamida en concentraciones variadas, que se adaptan a diferentes tipos de piel. Algunos ejemplos de productos con niacinamida incluyen sueros, cremas y geles hidratantes.
En resumen, la niacinamida es un ingrediente versátil y beneficioso para la piel, siempre y cuando se utilice en la concentración adecuada para cada tipo de piel. Es importante tener en cuenta las recomendaciones de los expertos y seleccionar productos que se adapten a las necesidades específicas de la piel.