El Ayuntamiento activa la alerta por fenómenos costeros y por vientos

La Dirección General de Seguridad y Emergencias pidió a la ciudadanía que extreme las precauciones para evitar situaciones de riesgo. El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, a través de la Concejalía de Seguridad, Convivencia y Cultura, actualizó la situación de prealerta a alerta por vientos y declaró la situación de alerta por fenómenos costeros, siguiendo las instrucciones de la Dirección General de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias.

Recomendaciones ante fuertes vientos

El Consistorio mantuvo activo el Plan de Emergencias Municipal de Las Palmas de Gran Canaria (PEMULPA) para atender cualquier tipo de emergencia que pudiera producirse a causa de estas situaciones. Ante la situación de fuertes vientos, la Dirección General de Seguridad y Emergencias planteó una serie de recomendaciones para evitar daños, como cerrar puertas y ventanas para prevenir corrientes de aire que pudieran llevar a la rotura o caída de cristales. También se sugirió retirar de balcones y azoteas las macetas y otros objetos que pudieran caer a la calle.

Es fundamental revisar las viviendas para asegurarse de que no haya cornisas, balcones y fachadas en mal estado que pudieran producir caídas de cascotes y escombros. También se recomendó evitar salir de excursión o acampada hasta que se restableciera la normalidad. Se prefirió aplazar los desplazamientos por carretera y, en caso de realizarlos, extremar las precauciones y, siempre que fuera posible, utilizar el transporte público.

Precauciones al circular

Las motos y los vehículos de grandes dimensiones, como camiones, furgonetas o vehículos con remolque, corrieron el riesgo de volcar ante vientos transversales. Para protegerse, se aconsejó no caminar por jardines o zonas arboladas, así como alejarse de muros, casas viejas, andamios, letreros luminosos, vallas publicitarias y demás estructuras susceptibles de ser derribadas por el viento.

Los postes de luz y torres de tensión también pudieron representar un peligro, por lo que se recomendó permanecer a distancia y avisar al 112 en caso de riesgo, lo mismo que con las grúas de construcción. Además, se aconsejó alejarse de la costa para evitar ser golpeado o arrastrado por la acción de las olas.

Se recomendó circular despacio y con precaución ante la posible presencia de obstáculos en la vía o golpes de viento que pudieran hacer perder el control del vehículo, especialmente durante adelantamientos. También se sugirió evitar hacer llamadas telefónicas para prevenir que se colapsaran las líneas.

Prevención ante fenómenos costeros

Para prevenir los daños por fenómenos costeros, se recomendó proteger la vivienda ante la posible invasión del agua del mar. Se enfatizó en la importancia de no situarse en el extremo de muelles o espigones ni arriesgarse a sacar fotografías o vídeos cerca de donde rompen las olas.

También se aconsejó evitar la pesca en zonas de riesgo y no circular con vehículos por carreteras cercanas a la línea de playa. Se instó a no bañarse en playas apartadas o que no se conocieran suficientemente debido a la posibilidad de remolinos locales, así como en playas con bandera roja o en zonas con fuerte oleaje y resaca que carecieran de servicios de vigilancia y salvamento.

Se recomendó no realizar prácticas deportivas y náuticas en las zonas afectadas por el mar de fondo y no acampar en la playa cuando hubiera alerta por temporal de mar. Si se percibía cierto oleaje fuera de lo normal, se sugirió no permanecer cerca del mar ni acercarse, incluso si parecía calmarse de repente. Si se disponía de embarcación, se debió asegurar su amarre en un lugar resguardado.

Por último, se aconsejó advertir a otras personas que se encontraran en lugares peligrosos sobre el riesgo que corrían.