Las importaciones y exportaciones de China cayeron más de lo esperado el mes pasado, ya que la débil demanda global amenazaba las perspectivas de recuperación de la segunda economía más grande del mundo.
Las cifras oficiales muestran que las exportaciones cayeron un 14,5% en julio en comparación con el mismo mes del año anterior, mientras que las importaciones disminuyeron un 12,4%.
Las preocupantes cifras comerciales refuerzan las preocupaciones de que el crecimiento económico del país pueda disminuir aún más este año.
Esto aumentará la presión sobre Pekín para ayudar a impulsar la recuperación posterior a la pandemia.