El COVID-19, también conocido como coronavirus, es una enfermedad infecciosa causada por un nuevo virus que no había sido detectado en humanos antes. Este virus causa una enfermedad respiratoria similar a la gripe y se propaga principalmente a través de gotas respiratorias de una persona infectada cuando tose o estornuda. También puede contagiarse al tocar una superficie u objeto contaminado y luego tocarse la boca, la nariz o los ojos. Los síntomas comunes incluyen fiebre, tos seca y dificultad para respirar. En casos más graves, la enfermedad puede causar neumonía, síndrome de dificultad respiratoria aguda, insuficiencia renal e incluso la muerte. La mejor manera de prevenir la infección es lavarse las manos con frecuencia, evitar tocarse la cara y mantener una distancia de al menos un metro de las personas que estén tosiendo o estornudando. También se recomienda usar mascarillas y evitar las aglomeraciones de personas. Es importante seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias y acudir al médico si se presentan los síntomas o se ha estado en contacto con una persona infectada. La prevención y el control son fundamentales para combatir la propagación de este virus y proteger nuestra salud y la de los demás. Solo juntos podemos superar esta crisis.