Las facciones rivales del ejército de Sudán han acordado renovar una tregua de tres días, poco antes de que expire. La extensión sigue a intensos esfuerzos diplomáticos de países vecinos, así como de EE. UU., Reino Unido y la ONU. Sin embargo, continúan los informes de intensos combates en la capital Khartoum. La tregua anterior permitió que miles de personas intentaran huir a un lugar seguro, mientras que decenas de países trataban de evacuar a sus ciudadanos. Casi dos semanas de combates entre el ejército y un grupo paramilitar rival han dejado cientos de muertos.