El Ministerio de Defensa de Rusia ha afirmado que se están llevando a cabo preparativos para que el grupo de mercenarios Wagner entregue su armamento militar.
Esto se produce después de que el presidente Vladimir Putin confirmara que varios pilotos rusos murieron durante la revuelta del fin de semana.
Los miembros de Wagner, de los cuales Putin dijo que eran en su mayoría verdaderos patriotas que habían sido engañados en una aventura criminal, podrían elegir unirse al ejército regular, regresar a sus familias o ir a Bielorrusia.
También se anunció que el FSB retiraría todos los cargos criminales contra aquellos que participaron en la revuelta.