El Ayuntamiento se suma un año más a la campaña de protección de la pardela cenicienta

Operarios del servicio de playas del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria rescataron a un ejemplar de esta especie protegida, gracias a la colaboración ciudadana. La ciudad se unió, como cada año, a la campaña de protección de la pardela cenicienta, impulsada por el Cabildo de Gran Canaria, para recuperar y ayudar a volver al mar a los pollos de esta especie marina que inician en otoño su primer vuelo. Gracias a la colaboración ciudadana, se recuperó un ejemplar en la zona de La Cícer, en la playa de Las Canteras, que fue trasladado al centro de recuperación de fauna en Tafira.

Características de la pardela cenicienta

La pardela cenicienta es una de las mayores aves marinas de Canarias. Es una especie pelágica y migratoria que acude a la costa solo para reproducirse. Precisamente, en esta época del año, los pollos, al realizar sus primeros vuelos, se desorientan con la contaminación lumínica y resultan heridos al caer al suelo, impidiendo que puedan remontar el vuelo.

Colaboración del Ayuntamiento

El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria colabora cada año en el rescate y traslado de estos ejemplares de pardelas al centro de recuperación de fauna silvestre del Cabildo de Gran Canaria en Tafira, para después ser devueltas a su hábitat natural y continuar su migración atlántica.

Rescate del ave

La pardela rescatada a primeras horas del día fue avistada por un ciudadano, surfista habitual de la zona, quien avisó al servicio de Ciudad de Mar. Los operarios de playas recuperaron al ave y la trasladaron de manera inmediata a Tafira.

Instrucciones para la población

Ciudad de Mar recuerda a la ciudadanía que, en caso de encontrar un pollo de pardela, se debe avisar al centro de recuperación de fauna silvestre, al 112, a la Policía Local o comunicarlo directamente a los operarios de limpieza y mantenimiento de playas.

Para no dañar al pollo, se debe recoger ayudados con una toalla o un elemento similar para evitar que se asuste. Se debe introducir en una caja de cartón con agujeros y dejarla en un lugar fresco y oscuro, sin alimentarlo ni darle de beber, hasta que se proceda al traslado del ave por parte de los servicios públicos.