Se han desarrollado todos estos hitos en áreas como la transformación digital y la transición energética de la economía, las pensiones, la investigación, desarrollo e innovación, la educación, el tratamiento de agua, la digitalización de los servicios públicos, incluida la justicia, así como en materia de cooperación interterritorial.
La Comisión ya había valorado positivamente el cumplimiento de los 44 hitos y 16 de los 17 objetivos propuestos por España. Quedaba pendiente de cumplimiento el Programa Agentes del Cambio, que se había rediseñado y había sido objeto de una nueva convocatoria para cumplir con el objetivo intermedio en los meses siguientes.
Líderes en la UE en transferencias
El desembolso comunicado se suma a los 38.080 millones de euros ya recibidos en forma de transferencias, alcanzando un total de 47.943 millones, el 60% de lo que le correspondía en transferencias no reembolsables. En relación con los hitos y objetivos, nuestro país había cumplido 181, lo que representa el 36% de los hitos y objetivos del Plan vinculados a transferencias.
España lideró la ejecución de transferencias del Plan. Junto con Italia, fue el país con mayor número de hitos y objetivos cumplidos en términos absolutos. También fue el país que más transferencias de la UE había recibido, con un total de casi 48.000 millones de euros.
Algunos de los hitos y objetivos más destacados
Entre los principales hitos y objetivos validados por la Comisión, destacan las adoptadas en el ámbito de las pensiones, como la sustitución del factor de sostenibilidad por un mecanismo de equidad intergeneracional, la adecuación del periodo de cómputo para el cálculo de la pensión de jubilación y la adecuación de la base máxima de cotización. Estas medidas contribuirían a la equidad y la sostenibilidad del sistema de pensiones.
También se destacaron las reformas dirigidas a impulsar el emprendimiento y el clima de negocios, específicamente la entrada en vigor de la Ley Crea y Crece y la Ley de Start-Ups. A través de dichas leyes, se pretendía simplificar los procedimientos de creación de empresas y promover fuentes diversificadas de financiación para el crecimiento empresarial, así como establecer un marco favorable para la constitución y el crecimiento de empresas emergentes altamente innovadoras.
Entre las medidas encaminadas a lograr una economía más verde y sostenible, sobresalieron el paquete de medidas sobre la economía circular y la Ley de Residuos y Suelos Contaminados.
Por su parte, la Ley de Vivienda supuso un importante avance para garantizar el derecho a una vivienda digna y adecuada a través de una regulación pionera en España de los distintos instrumentos públicos de planificación, programación y colaboración entre administraciones.
También se cumplieron los compromisos en el ámbito de la función pública con la aprobación de medidas legislativas para mejorar la planificación, organización y gestión de los recursos humanos, el refuerzo de la transparencia y la agilidad de los procesos selectivos, o la regulación de la evaluación del desempeño. Además, se incluyeron cambios en el acceso a puestos de alto funcionario, dando prioridad a los criterios de mérito y competencia, así como la regulación de la figura del directivo público profesional en la Administración del Estado.
Reformas e inversiones
Asimismo, se destacaron las reformas e inversiones para mejorar la eficiencia y la digitalización de los procedimientos judiciales. Las iniciativas intensificaron el uso de la tecnología para llevar a cabo acciones judiciales telemáticas con plena seguridad jurídica e introdujeron reformas en la legislación procesal para aumentar la rapidez de los procedimientos en los órdenes contencioso-administrativo y social.
Junto a las reformas, en esta solicitud de pago cada vez ganaban más peso las inversiones, cuyo cumplimiento evidenció que los fondos del Plan de Recuperación fluían a todos los ámbitos de la economía. Merecieron atención particular los programas de apoyo a las pymes para dotarlas de las capacidades y herramientas necesarias para contribuir a la transición digital y enfrentar los retos que se derivaban de ella.
También se destacaron las inversiones en proyectos de I+D+i y el avance en los Proyectos Estratégicos de Recuperación, Transformación Económica (PERTEs), con una importante contribución del PERTE del Vehículo Eléctrico.
Además, el Plan de Recuperación benefició a los municipios con inversiones significativas para la movilidad sostenible y los planes de acción urbana. También el mundo rural se vio beneficiado por las inversiones ejecutadas en este desembolso, con medidas para mejorar la eficiencia y la digitalización de los regadíos.
Asimismo, se realizaron cuantiosas inversiones en ámbitos estratégicos, como la dotación de 50.000 nuevas plazas de Formación Profesional o la mejora y sostenibilidad de las zonas de regadío, así como la restauración de zonas y ecosistemas en el litoral y las redes transeuropeas de transporte.