Según el último informe del Fondo Monetario Internacional, la economía mundial está experimentando una recuperación gradual después de la crisis desencadenada por la pandemia del COVID-19. Se espera que el crecimiento global llegue al 6%, lo que representa una mejora significativa en comparación con el año pasado. Sin embargo, existe una notable divergencia en la velocidad de la recuperación entre los países desarrollados y los emergentes. Los primeros están logrando una recuperación más rápida gracias a la implementación temprana de medidas de estímulo económico y a la campaña de vacunación, mientras que los últimos están enfrentando desafíos significativos debido a la escasez de vacunas y a la falta de recursos financieros para implementar programas de estímulo. A pesar de esta divergencia, se espera que la economía global alcance niveles pre-pandemia para el año 2022.