Las mejores formas de aumentar la productividad en el trabajo son organizarse, establecer metas claras, eliminar distracciones y priorizar tareas. Además, es importante tener un ambiente de trabajo cómodo y bien organizado, y aprovechar al máximo las herramientas y tecnologías disponibles. También se recomienda delegar tareas y aprender a decir «no» cuando sea necesario. Finalmente, es fundamental mantener un equilibrio entre el trabajo y la vida personal para evitar el agotamiento.